Anunciado su retiro del básquet profesional, Emanuel Ginóbili recibió tres bizarras ofertas laborales que nada tienen que ver con el deporte que lo catapultó a la fama.
Si bien en su despedida Manu aclaró que ahora tendrá tiempo para "estar en familia y comer asados", algunas empresas de diversa índole se atrevieron a postularse como nuevos empleadores del bahiense.
La primera firma en abrirle sus puertas a Ginóbili fue Terminix, una de las compañías de control de plagas más grandes de Estados Unidos.
En su afán por contar con sus servicios, la fumigadora recordó el curioso episodio que protagonizó Manu en la temporada 2009, cuando en pleno partido ante Sacramento Kings cazó con la mano un murciélago que se había colado en el estadio AT&T Center y había interrumpido las acciones. En consecuencia, le propusieron un trabajo como "técnico part-time especializado en eliminación de murciélagos".
"Te capacitaremos en diferentes métodos alternativos y te proporcionaremos equipo de protección para garantizar tu seguridad. Pero la calma y precisión que mostraste en ese momento se alinean bien con las capacidades que necesitamos para servir a nuestros clientes", posteó Russ Garceau, director de Terminix, ironizando con las consecuencias que tuvo para Manu aquel insólito episodio.
Como algunos recordarán, en los días siguientes a la "cacería" Manu tuvo que ponerse ocho dosis de la vacuna antirrábica como prevención.
Otra de las increíbles propuestas que tocaron las puertas del cuatro veces campeón de la NBA se la hizo David Robinson, su excompañero en San Antonio Spurs. Su compañía especializada en inversiones, Admiral Capital Group, está buscando candidatos para un puesto de gerente en la división de negocios inmobiliarios. Y Robinson, ni lerdo ni perezoso, se lo ofreció al exescolta de la franquicia texana.
"Gran oportunidad para sumarse a Admiral Capital. Tenemos un lugar para vos, Manu Ginóbili", escribió Robinson en su cuenta de Twitter con una cuota de picardía. En caso de aceptarla, a Manu se le plantearía un serio escollo porque debería mudarse a Dallas o Nueva York.
Asimismo, el Sea Life Aquarium y Leoland Discovery Center que se inaugurará en San Antonio a principios del año que viene también se postuló para que "el pibe de 40" consiga una nueva vocación.
Jeremy Aguillen, manager general de la empresa, le escribió una carta al bahiense para felicitarlo por su carrera "estelar" y aseguró que es un gran candidato para el puesto de "Director Honorario de Diversión".
Entre las responsabilidades más destacadas, Manu debería elegir a la persona que construirá un horizonte de la ciudad hecho enteramente de Legos para la fiesta de inauguración del parque, y ayudar a selecconar los nombres de los nuevos animales que vivirán en el acuario.
"Marianela, Dante, Nicola y Luca -la esposa e hijos del argentino- serán bienvenidos en el acuario para conocer en persona a sus nuevos habitantes", expresó Aguillen con el objetivo de tentar más aún al baluarte de la Generación Dorada del básquetbol albiceleste.
A falta de la NBA, Manu puede relajarse en cuanto a su futuro laboral porque es codiciado por diversos ámbitos.