El presidente estadounidense Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un llegaron a Singapur el domingo, dos días antes de una cumbre sin precedentes que busca resolver la tensión provocada por el arsenal nuclear de Pyongyang.
El avión presidencial Air Force One aterrizó en una base militar proveniente de Canadá, donde Trump participó en la cumbre del G7.
Horas antes, el avión que trasladó a Kim aterrizó entre fuertes medidas de seguridad en el aeropuerto de la ciudad. Tras dar la mano al secretario de Exteriores de Singapur, Kim recorrió las calles de la ciudad en una limusina
"El mundo entero está observando esta histórica cumbre entre Corea del Norte y Estados Unidos, y gracias por sus sinceros esfuerzos...seremos capaces de completar los preparativos para la histórica cumbre", dijo Kim a Lee a través de un intérprete.
Esta reunión genera un gran interés a nivel mundial por el repentino giro de Kim hacia la diplomacia en los últimos meses, luego de los ensayos nucleares y de misiles del año pasado que derivaron en serios temores a una guerra.
Según muchos expertos, el Corea del Norte estaría en condiciones de poder atacar cualquier parte del territorio estadounidense con sus misiles nucleares, y aunque hay escepticismo acerca de que Kim vaya a entregar rápidamente esas armas, también hay esperanzas de que la diplomacia pueda sustituir a las hostilidades entre Washington y Pyongyang.
Parte del interés en la cumbre del martes es un simple reflejo de las limitadas apariciones de Kim en el escenario internacional. Desde que asumió el poder tras la muerte de su padre a finales de 2011, solo salió del país públicamente en tres ocasiones: dos a China y una en la que cruzó la frontera que comparte con Corea del Sur hasta la parte sur de la zona desmilitarizada para encuentros con los líderes de ambos países.
A dos días de la celebración de la cumbre, no está claro qué decidirán Trump y Kim durante el encuentro.
Pyongyang dijo que está dispuesto a entregar todo su arsenal nuclear a cambio de una garantía fiable de seguridad de Estados Unidos y otros beneficios. Pero muchos consideran que esto es altamente improbable dada la inversión de Kim en este armamento, que además son consideradas la principal garantía para mantenerse en el poder.