La organización separatista vasca ETA reconoció "el daño que ha causado en el transcurso de su trayectoria armada" y pidió perdón a las víctimas por primera vez en su historia por el "sufrimiento desmedido". Se estima que es responsable de alrededor de 850 muertes.
"Somos conscientes de que en este largo periodo de lucha armada hemos provocado mucho dolor, incluidos muchos daños que no tienen solución. Queremos mostrar respeto a los muertos, los heridos y las víctimas que han causado las acciones de ETA, en la medida que han resultado damnificados por el conflicto. Lo sentimos de veras", asegura el grupo en un comunicado publicado hoy por el diario vasco Gara, a pocos días del anuncio oficial de su disolución definitiva.
Asimismo, la organización hace una mención especial a aquellas víctimas que "no tenían una participación directa en el conflicto, tanto en Euskal Herria (País Vasco) como fuera de ella" y que sufrieron "las consecuencias de errores o decisiones erróneas".
"Sabemos que nuestra actuación ha perjudicado a ciudadanos y ciudadanas sin responsabilidad alguna. También hemos provocado graves daños que no tienen vuelta atrás. A estas personas y a sus familiares les pedimos perdón. Estas palabras no solucionarán lo sucedido, ni mitigarán tanto dolor. Lo decimos con respeto, sin querer provocar de nuevo aflicción alguna", agregó..
ETA tiene previsto disolverse oficialmente el primer fin de semana de mayo en un acto en el País Vasco francés. Esto se llevará a cabo a un año de su desarme, el 8 de abril de 2017, y seis años y medio después del cese definitivo de la lucha armada, en octubre de 2011.
En una primera reacción, el gobierno español valoró el comunicado y aseguró que es una consecuencia de la "fortaleza del Estado de derecho". "Está bien que la banda terrorista pida perdón a las víctimas, porque las víctimas, su memoria y su dignidad, han sido determinantes en la derrota de ETA", señalaron fuentes del Ejecutivo español.
Sin embargo, las principales asociaciones de víctimas de ETA expresaron su insatisfacción porque consideran que la organización separatista pretende "justificar la violencia", "manipular la historia" y "distinguir entre víctimas".
Ante la sensible situación, el vocero del Ejecutivo español, Iñigo Méndez de Vigo, sostuvo que el comunicado "certifica la derrota total de ETA".