El papa Francisco celebra discretamente sus 80 años este sábado, con un desayuno con ocho indigentes y luego una misa con cardenales.
El Vaticano informó que el pontífice habló con cada uno de los invitados sin hogar y les compartió tortas argentinas antes de irse a la misa.
Estando con los cardenales, les habló del proceso de envejecer: "Desde hace unos días he pensado una palabra que parece horrible: vejez, un pensamiento que asusta''. Pero luego recordó las palabras que dijo en su primer saludo papal en 2013: "La vejez es la sed del conocimiento''.