Cristina Fernández de Kirchner brindó una conferencia de prensa poco antes del mediodía en el Instituto Patria, ubicado en la zona porteña de Congreso.
"Estamos en un marco económico y social complejo, endeudados, con una inflación incontrolable, con desocupación creciente, pérdida de poder adquisitivo, tarifazo en marcha y con otro en ciernes después del 22", abrió en su discurso de más de una hora.
"Hay un deterioro de la calidad democrática de la Argentina. Un deterioro que no es descuido, sino una consecuencia de una política deliberada de debilitamiento y destrucción de unas garantías básicas del Estado de derecho. Esta política está al menos autorizada por el presidente Mauricio Macri. Tiene una concentración de poder inédita y novedosa en nuestra democracia", acusó.
Asimismo, afirmó que "cruzaron todos los limites" al referirse al llamado a indagatoria del juez Claudio Bonadio: "Nos llamó sobre un hecho que no es judiciable, y sobre el cual tuvo participación como juez y fue apartado por encubrimiento de ese hecho. Vulnera todas las garantías constitucionales. Considero inaceptable esta judicialización en paralelo con el panorama electoral".
Por otra parte, sostuvo que "hay un deterioro grave de las garantías electorales y de las libertades publicas. Hay personas privadas de su libertad por escribir un tuit, o por estar cerca de una protesta, o por besarse en una estación de tren. Hay un creciente temor de la ciudadanía".
En referencia a esto, acusó a Macri de "intimidar nuestras candidaturas y a nuestros votantes, de jugar sucio y vulnerar los derechos de millones de personas, y de obscenidad política, permitiendo a un juez crear un clima de persecución política inaceptable".
Al ser cuestionada sobre la tragedia de Once, afirmó: "las responsabilidades penales, civiles, y administrativas serán resueltas por la Justicia. En el caso de Bonadio, no hubo un manejo de la justicia en nuestro caso. Si yo hubiera tenido las mismas ideas de Macri, yo habría mandado a los representantes de nuestro espacio a que Bonadio fuera desplazado. Las decisiones que se tomaron en el Consejo de la Magistratura se tomaron según lo que decía en el expediente. El juez Bonadio nunca fue una persona que simpatizara con mi gestión, y sin embargo no intervine en su contra".
Por último, tras criticar duramente las políticas económicas del Gobierno, cerró su discurso con una contundente afirmación: "Hoy, de cada tres argentinos, 2,8 o 2,9 son pobres".
