Instantes de tensión se vivieron esta tarde frente al Juzgado Federal de Esquel, en Chubut, cuando manifestantes golpearon un vehículo en el que suponían que salían gendarmes tras declarar en la causa por la desaparición de Santiago Maldonado, aunque quien se retiraba era la fiscal Silvina Ávila, que interviene en el caso.
Alrededor de las 13.30, llegó al lugar una camioneta con miembros de la Policía Federal, ingresó a la sede judicial y al salir, poco después, recibió golpes de puño y patadas de parte de algunas personas, convencidas como la mayoría de los presentes, incluidos periodistas, de que en el vehículo se retiraban los gendarmes. La información comenzó a circular a través de las redes sociales y luego ganó cobertura nacional.
Aunque durante unos pocos minutos hubo tensión y algunas corridas, poco después los manifestantes procedentes de Bariloche, El Bolsón, Esquel y de la comunidad mapuche de Cushamen volvieron a agruparse ante la sede del Juzgado Federal, donde declararon tres gendarmes.
Se trata de los gendarmes Neri Armando Robledo, César Peralta y Walder Ruiz Díaz.