Si bien trascendió que el Gobierno había pedido hacer foco en el accionar de siete gendarmes que se separaron del grupo para seguir a los manifestantes hasta el río Chubut, el lunes por la noche se confirmó que eran 8, y que uno de ellos aún no había declarado.
Según publicó el diario La Nación, se trataría de Neri Armando Robledo, que, según revelaron fuentes de la investigación, reconoció al ser interrogado por Gendarmería que le dio un "piedrazo" en la "espalda" a una de las personas que escapaban por el río.
Según su declaración, el gendarme le confesó por primera a sus superiores del Ministerio de Seguridad vez que hirió a un manifestante. Le tiró una piedra en la espalda, el hombre cayó y fue socorrido por dos mapuches. A partir de estas declaraciones, el juez federal Guido Otranto lo indagará esta mañana.
Al día siguiente del operativo del 1° de agosto, Robledo pidió licencia por enfermedad del padre. Ahora que se reincorporó, confesó que hirió a un manifestante.