De acuerdo al orden de prioridades efectuado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el personal de salud y las personas mayores de 65 años serán los primeros en recibir la vacuna contra el coronavirus una vez desarrollada.
"Son dos sectores muy expuestos a la enfermedad. Los mayores de 65 porque, por definición, son grupo de riesgo y está demostrado que es el segmento de la población para el que la pandemia resulta más mortal", manifestó el médico pediatra infectólogo y director de la Fundación Infant, Fernando Polack.
Y agregó: "Los médicos, a la vez, están expuestos a pacientes que tienen una carga viral alta. No corren el mismo riesgo que alguien que trabaja en su casa o alguien que se expone al virus cuando hace una compra en el supermercado. Es importante protegerlos para que no se enfermen en primer lugar, y también para que no sean un vector de contagio".
Con respecto al estudio de prueba de la vacuna contra el covid-19 que comenzará en agosto en el Hospital Militar de la ciudad de Buenos Aires, Polack había apuntado también a "los trabajadores esenciales, sobre todo a la población de salud".
Argentina fue seleccionada como el único país de la región para llevar adelante una de las fases de prueba con personas de la vacuna contra el coronavirus que preparan Pfizer Inc. y BioNTech SE.
Las fases 1 y 2 de la vacuna comenzaron a fines de abril en Alemania y en mayo en los Estados Unidos, mientras en la primera fase de ensayos clínicos la vacuna arrojó señales alentadoras, al demostrar que es bien tolerada por humanos. También se comprobó que es inmunogénica, es decir capaz de general anticuerpos.
"No puedo contestar sobre la posibilidad de éxito, pero hay datos de esta vacuna en un ensayo previo que están publicados y que muestran que con dos dosis genera respuestas de anticuerpos de 10 a 20 veces mejores que una infección normal por coronavirus", indicó.