Martín Guzmán: "Algunos bonistas ya aceptaron el canje y con el resto seguiremos negociando"

El funcionario no reveló qué porcentaje de bonistas aceptaron la oferta. Se mostró optimista. "Aún hay tiempo para acordar", dijo.

Martín Guzmán: "Algunos bonistas ya aceptaron el canje y con el resto seguiremos negociando"
(Foto: Clarín)

El ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró este miércoles que algunos bonistas de la Argentina ya aceptaron el canje de deuda propuesto por el Gobierno y señaló que se seguirá pulseando con el resto para intentar un acuerdo mayoritario dentro del plazo establecido, que termina el viernes a las 17:00.

Guzmán dijo que en las últimas jornadas notó cierta "flexibilidad" por parte de importantes sectores de los acreedores para negociar el canje de bonos soberanos y señaló que llegar a un acuerdo es también interés de los bonistas, por lo que se mostró optimista sobre el resultado de las negociaciones.

Afirmó que si bien Argentina no mejoró la oferta en los últimos días, el Gobierno también fue “flexible” en los diálogos mantenidos con los acreedores dado que la oferta elaborada inicialmente en el primer trimestre de este año contemplaba un plazo de gracia de cuatro años y confluyó a tres años de acuerdo con las posibilidades que dieron los bonistas en los primeros diálogos.

Según confirmó el funcionario en una teleconferencia con la Universidad de Columbia (en la que trabajó hasta noviembre cuando fue convocado por el entonces presidente electo Alberto Fernández), "algunos acreedores ya aceptaron la oferta mientras continúan las negociaciones con otros, todavía hay tiempo para que cierre el plazo establecido". No precisó qué porcentaje aceptó la propuesta.

Guzmán se expresó en una charla titulada “Argentina, entre el Covid-19 y la crisis de deuda soberana”, en la que dio un pantallazo general sobre cómo prevé serán las variables macroeconómicas del país durante la década presente. “La estabilidad es lo que busca este Gobierno, sin ello no hay plan posible”, dijo.

La convocatoria de Columbia estuvo dirigida por Victoria Murillo, del Instituto latinoamericano de la Universidad. Participaron también el profesor y director del Centro para el desarrollo sustentable de la Universidad de Columbia, Jeffrey Sachs y el economista argentino Martín Uribe.

El ministro reconoció que un default sería contraproducente para las posibilidades de despegue que pudiera tener el país cuando termine la cuarentena obligatoria con la que se busca contener la propagación del coronavirus.

“Argentina no puede moverse hacia adelante sin una reestructuración de su deuda externa”, admitió el funcionario al destacar la importancia para el país de alcanzar un acuerdo con los bonistas que tienen en sus manos papeles emitidos en 2005 y 2016 bajo legislación extranjera.

El funcionario argentino se mostró optimista sobre el resultado que podrían arrojar las negociaciones con los acreedores. “Intentamos tener un entendimiento común con ellos”, dijo al destacar que las negociaciones se están desarrollando con el 8 de mayo como fecha límite.

El ministro de Economía insistió con que la Argentina no tiene la capacidad, mucho menos después del impacto de la pandemia, de ofrecer condiciones más beneficiosas para los acreedores porque no sabe si podrá cumplirlas, por lo que sólo acepta comprometerse con aquello que sí podrá respetar en el futuro, independientemente de quién gobierne.

Guzmán habló del desmejoramiento de las condiciones sociales que se inició en los últimos años y se profundizará ahora con la pandemia, más allá de los esfuerzos fiscales del Gobierno para ayudar a la población vulnerable. "Más de la mitad de los niños de la Argentina ya están en la pobreza", puntualizó.

El economista Sachs reflexionó en la teleconferencia conjunta que es “absurdo” que los acreedores de país sigan pretendiendo tasas de interés del 7%, tal como lo indican los bonos canjeables emitidos en 2016, cuando en el mundo no llegan a cobrar 1,5 en el mejor escenario y la tasa de referencia global, la de los Estados Unidos, está entre cero y 0,25% y hay otros bonos de la superpotencia mundial que pagan 1,2%.

Por la corresponsalía de Buenos Aires.