En las últimas horas, continuaron los escraches de vecinos a profesionales de la salud en contacto con posibles infectados de Covid-19 por temor a que ingresen el virus a los edificios y el contagio se vuelva masivo.
Ayer por la noche, cuando el psicólogo y enfermero Rodrigo Cuba llegó a su departamento del barrio porteño de Balvanera luego de una ardua jornada laboral en la Cruz Roja, donde se desempeña como director de Emergencias, se encontró con un cartel pegado en el espejo del ascensor de su edificio.
"Estimado vecino Rodrigo del 7B, es hora de que empieces a cuidar a tus vecinos, sabemos de tu trabajo en la Cruz Roja pero hoy nos toca cuidarnos. Por favor, no vuelvas a casa, el Estado tiene refugios para el personal de la salud, no vuelvas nunca más", decía el comunicado.
No es la primera vez que sucede un evento de estas características. Con el avance de la pandemia en la Argentina, estos escraches se volvieron más frecuentes. Pero todos tienen la misma particularidad: son mensajes anónimos y lo único que se hace visible es el nombre del médico en cuestión.
"Lo vi cuando llegué a casa a eso de las 22.40 horas. Paso muchas horas afuera porque la situación lo amerita. Mientras subía a mi departamento, leí el nombre 'Rodrigo' y pensé que podía ser otro. Pero a medida que seguí leyendo y cuando leí 'Cruz Roja' me di cuenta de que el mensaje estaba destinado a mí", relató el joven.
Al leer el cartel, lo invadió la desazón. "Me sentí triste porque lo primero que uno quiere cuando termina de trabajar es volver a su casa. Pero también quiere que esa vuelta a casa no le genere problemas al resto de las personas", contó.
Según Cuba, hasta ese momento jamás había tenido ningún altercado con los vecinos y nadie le había hecho ningún comentario al respecto. "La desinformación genera estigma y esto es un claro caso de desinformación", aseguró.
Y aclaró: "Así como algunos estuvieron de acuerdo en colgar ese cartel hay otros, que son los más, que incluso bajaron a mi depto a decirme: 'Quedate tranquilo que por nosotros está todo bien, no tenemos problemas en que vuelvas a casa'.
"Prefiero quedarme con ese gesto de solidaridad", remarcó. Según él, "es imposible saber quién pegó el cartel porque el edificio no tiene cámaras de seguridad". Igualmente, señaló que tampoco quiere iniciar una "caza de brujas" para identificar al que tomó la iniciativa.
"Eso lo único que hace es generar enojo. Solo necesitamos estar juntos para hacerle frente a los que está pasando. Esto nos tiene que servir para estar más juntos", enfatizó.
Eduardo "Wado" de Pedro, ministro del Interior de la Nación, se expresó al respecto en su cuenta oficial de Twitter y compartió una foto de Cuba: "Hay que cuidar a los que nos cuidan. Discriminar a las y los trabajadores que ponen el cuerpo en este momento es un acto de cobardía e ignorancia. La única manera de salir adelante es con más solidaridad y unidos. Gracias a nuestros héroes en esta pelea".