Un testigo de 21 años, que se presentó espontáneamente este lunes en la fiscalía que investiga el asesinato de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell, aportó detalles de la golpiza de los rugbiers e incluso identificó a siete de ellos.
"Escuché voces que decían 'Negro de mierda'. Fernando (Báez Sosa) no pegó, solo trataba de defenderse. El de camisa negra le pegó dos puntinazos en la cabeza! Otro de remera blanca y pantalón oscuro también tiraba piñas y patadas", declaró el turista ante la fiscal Verónica Zamboni.
La declaración de este testigo es fundamental para los abogados de la familia de Fernando, ya que pudo ubicar a siete de los rugbiers acusados, cumpliendo diferentes roles.
"Al único que vi que le pegaba en la cabeza era el de camisa negra. El de camisa negra arengaba y le decía 'cagón, levantate'", indicó en su declaración, a la que tuvo acceso Clarín. El señalado es Máximo Thomsen, imputado como coautor del hecho.
"Estábamos enfrente al boliche y en eso veo que a donde había estacionado un auto marca VW modelo Vento que se empieza a sacudir, puse mi atención ahí y advertí que había una pelea. Veo justo cuando cae Fernando, vi claramente cuando le pegaban. Lo primero que veo es a Fernando como arrodillado tratando de defenderse con los brazos, él imposibilitado de pegar, solo tratando de defenderse", relató.
Y continuó: "Uno de los que vi fue el de camisa negra desprendida (Thomsen). Ese chico parecía el líder del grupo, era el que iba al frente, el que más pegaba".
En tanto, el testigo participará este martes de la última rueda de reconocimiento, por lo que su declaración podría ampliarse.
Los rugbiers detenidos son Luciano Pertossi (18), Ayrton Viollaz (20), Matías Benicelli (20), Alejo Milanesi (20), Blas Cinalli (18) y Juan Pedro Guarino (19), Máximo Thomsen (20), Enzo Comelli (19), Ciro Pertossi (19) y Lucas Pertossi (20).