Rafael Nadal protagonizó uno de los momentos de la jornada del Abierto de Australia. El español enfrentaba al argentino Federico Delbonis, al que venció en tres sets, cuando le propinó un pelotazo a una de las alcanzapelotas que se encontraba parada cerca de la red.
"Me he asustado porque tenía un gran golpe. La bola venía muy fuerte porque era un resto que le tienes que sumar la velocidad del servicio. Ha sido una fenómeno porque ha estado muy entera, y la bola le ha ido directa a la cabeza", dijo el número 1 del mundo tras el partido.
Al ver el pelotazo que le había pegado a la pequeña, se acercó a ver cómo estaba y le dijo un tierno beso en la mejilla. "Le caía un poco la lagrimilla pero la niña es una fenómena. Ha aguantado de manera fantástica y es un ejemplo", agregó.
Una vez consumada la victoria que lo metió en la tercera ronda del torneo que se disputa en Melbourne, el español volvió a hablar con la niña, y le regaló la vincha con la que había jugado, frente a la sorpresa y alegría de la alcanzapelotas. Hermoso gesto.
Fuente: EFE.