El presidente electo, Alberto Fernández, deslizó que podría tomar la decisión de pedirle al Fondo Monetario Internacional (FMI) que no envíe más dólares a la Argentina a cambio de estirar los plazos de repago de los 45.000 millones que ya llegaron al país y se ocuparon.
"La solución no es endeudarse más. La primera regla que tenemos que tener es dejar de pedir dinero", dijo Fernández y al ser consultado sobre si llegarán los 11.000 millones que faltan del crédito firmado por el gobierno de Mauricio Macri respondió: "No sé".
El presidente electo señaló en declaraciones a Radio Con Vos que hay un acuerdo que dice que el Fondo le enviará a la Argentina alrededor de 57.000 millones de dólares en los dos años que dura el cronograma de desembolsos. Hasta ahora llegaron 45.000 millones.
"Quedan alrededor de 11.000 porque hay una diferencia que se pierde en comisiones y otras cosas. Hay un punto en el que vos decís: ¡tengo un problemón y voy a pedir 11.000 millones más! ¡Yo lo que quiero es dejar de pedir y que me dejen pagar!", afirmó Fernández.
¿Puede dejar de pedir eso que ya está preacordado?, se le consultó al jefe de Estado electo. Y él respondió: “Si, podemos… podemos… absolutamente podemos”.
Fernández dijo que él intenta ser una "persona seria" y para ello debe cumple con su palabra. "Yo no quiero firmar acuerdos que no vamos a poder cumplir. Esos acuerdos ya los firmó Macri. Firmó uno, dos, tres… no cumplió ninguno", se quejó.
“La primera regla para cumplir, que es lo único que tenemos que hacer, es decir: no me presten más plata pero déjenme desarrollarme para poder pagarles. Es simple. ¿Cuánto tiempo necesito? No lo sé. Discutamos el tiempo que necesitamos para poner en marcha la economía, pero no me den más plata. Porque sino es como querer calmar la borrachera mientras uno sigue tomando vino. Al día siguiente te levantás y el problema que era de 45.000 millones es de 57.000 millones. Yo no quiero agrandar más el problema. Quiero resolverlo”, afirmó.
Pero aclaró que quiere “resolverlo con sensatez”. Por ello indicó que la Argentina tiene su economía paralizada desde hace dos años, con gran parte de sus fábricas paradas. “Hay que volver a dar créditos para producir”, sostuvo.
Y agregó: "Tenemos que dejar plata en el bolsillo de los jubilados para que la usen para lo que necesitan y no para pagar remedios. Tenemos que hacer estos cambios, porque eso es lo que va a volver a poner en movimiento a la economía. Esto se llama en todo el mundo de otro modo, pero acá se llama peronismo. Y el mundo se está replanteando las cosas".
Fernández dijo que Portugal es un "modelo" en el mundo porque no hizo lo que le recomendó el FMI, que consistía en seguir ajustando la economía. "Aumentó salarios de los empleados públicos, jubilaciones, promovió el consumo y se levantó. Tiene una ventaja que yo no tengo, que la Unión Europea le dio la plata para cancelar la deuda con el Fondo", dijo.
El Presidente electo sostuvo que parte de esto ya fue dialogado por él con la directora gerente del Fondo, Kristalina Georgieva. "Le dije el otro día a Kristalina que en la Argentina se dejaron de dar vacunas y reaparecieron enfermedades como el sarampión, la varicela y la tuberculosis. Marco esto para que la gente entienda la dimensión del ajuste. Cuando se llegó a esto es porque ajustaron lo que no debían", aseguró.
Y expresó que “eso evidencia cierto desprecio para con el otro. Es convertir a la gente en un número. Ahí hay chicos expuestos a enfermedades porque alguien decidió ahorrar en vacunas. Dejaron de dar las vacunas y reaparecieron las enfermedades. Esto es el ajuste”.
Por la corresponsalía Buenos Aires.