El líder opositor Luis Fernando Camacho negó este lunes que tras la renuncia de Evo Morales se haya producido un golpe de Estado y pidió que se lleve a cabo una transición pacífica.
"Nuestra posición fue bajo la resistencia pacífica en las calles, pidiendo en función de los tiempos primero nuevas elecciones y finalmente una renuncia en función de la palabra que empeñó el presidente Morales respecto a que si había muertos en su Gobierno renunciaría", señaló Camacho.
El líder cívico ya había pedido en la víspera no solo la renuncia del presidente, sino también de los parlamentarios y máximas autoridades judiciales para dar paso a un Gobierno transitorio conformado por "notables" que llamen a nuevas elecciones.
"No tumbamos Gobiernos, liberamos un pueblo en fe", indicó en un video que publicó en su cuenta de Twitter.
El líder cívico de la próspera región de Santa Cruz llegó a La Paz la semana pasada con la pretensión de entregar a Evo Morales en persona una carta para que renunciara.
El dimisionario presidente Morales instó este lunes a los opositores Carlos Mesa, su contrincante en las presidenciales, y al líder cívico que "asuman su responsabilidad de pacificar al país y garanticen la estabilidad política y convivencia pacífica de nuestro pueblo".