El exministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, repareció luego de mucho tiempo en silencio y dijo que trae sus dólares al país "para continuar viviendo" ya que su consultora todavía no le da ingresos suficientes.
"Hoy, que todavía no tenemos ingresos (con la consultora), estoy trayendo mis dólares, que tendría que ser al revés, para continuar viviendo", expresó el exdirectivo de Shell en una entrevista con LA NACION.
Al analizar la situación actual, Araguren, quien fue ministro hasta junio de 2018, aseguró que "es una simplificación decir que la culpa es de que las tarifas están dolarizadas". Con respecto a la política energética que siguió el kirchnerismo, dijo que fue la "época de intervención total de todas las variables" en la que "se utilizó la emergencia pública para dejar de aplicar otras leyes, (como) la ley del gas y la de electricidad".
"Esto duró del 2002 al 2015. ¿Cuál fue el resultado de esa intervención? Un país que tiene recursos renovables, no renovables, convencionales y no convencionales para tirar para arriba terminó importando energía. ¿Con esto estabilizamos la economía? No, porque aumentamos el gasto en empleo público y malversación, y aumentó la corrupción", consideró.
Sobre la gestión de Macri, señaló que se focalizó en la "transición hacia mercados competitivos", es decir, en "recuperar el valor de los entes reguladores; recuperar los marcos regulatorios; incentivar Vaca Muerta pero no como lo hizo el kirchnerismo. En industrias extractivas de largo plazo como pueden ser el petróleo, el gas, la minería, la energía en general, uno no puede estar cambiando a cada rato porque si no el tipo qué hace para protegerse de la Argentina: pone un precio alto porque no sabe qué le va a pasar mañana".
Esa situación, agregó, "obligó a extraer lo más rápido posible, que es lo que hicieron los gallegos en YPF. Cuando ellos aceptaron a los Eskenazi se aseguraron cobrar durante 10 años el 90% de la ganancia anual en forma de dividendos. Secaron la vaca, se llevaron todo. Los de Repsol vinieron acá a vendernos espejitos de colores".
"En esos tres períodos, en esa transición que todavía no terminó, la energía en el mundo, que es un bien transable, se comercia con una única moneda. Pesificar la energía es de vuelta vivir con lo nuestro. Entonces acá el problema es cómo logramos bajar el gasto en lugar de aumentar la deuda o los subsidios. ¿Quién va a poner la diferencia? ¿Nos vamos a arriesgar nuevamente a juicios en el Ciadi?", sostuvo.
En ese sentido, Aranguren pronosticó que si el próximo Gobierno toma las propuestas del Partido Justicialista en relación a las tarifas, las que coordinó Federico Bernal, actual asesor de Cristina Kirchner y exasesor de (Julio) De Vido, se va a poner de vuelta la energía de sombrero y Vaca Muerta, que es uno de los pocos desarrollos que podría estar ingresando recursos genuinos, no lo va a hacer".
En otro tramo de la entrevista, Aranguren se refirió a Nicolás Dujovne, exministro de Economía. "Cuando se nos cortó el chorro y tuvimos que ir al Fondo Monetario Internacional para pedir estos famosos 57.000 millones de dólares, de golpe, a partir del buen vínculo que tenía Dujovne con Madame (Christine) Lagarde se le dio a él una injerencia, un poder mayor que a un coordinador porque terminó (Gustavo) Lopetegui dependiendo de Dujovne".
"Pero si alguien veía que lo que se estaba haciendo, porque no se le daba bolilla o se le había impuesto una decisión porque el Fondo no lo autorizaba, mi responsabilidad era ir al Presidente y decirle si hacemos esto... Lo pongo de esta manera: la reinterpretación de la resolución 46 de Vaca Muerta yo no la hubiese hecho y se hizo eso porque en lugar de US$700 millones, que estaba mal calculado, que iban a dedicarse en el año 2019 a ese incentivo a la producción de gas, iban a ser 1.200 millones y no había. Yo digo, qué era lo mejor, cortar esos 500 millones para producir más gas o cortárselos a (Juan) Grabois o a la transferencia a alguna provincia, por ejemplo, Jujuy", recordó.
Con respecto a Marcos Peña, el jefe de Gabinete del Gobierno nacional, Aranguren afirmó que "es un cientista de la política, alguien que piensa que la sociedad se puede manejar desde un laboratorio. Es inteligente, pero él no estaba en las cosas diarias".
Además, reveló que en una reunión el 6 de enero de 2016, Peña se opuso a su propuesta para aumentar las tarifas eléctricas en un 450%.
"Marcos empezó a hablar de que la gente no nos votó para que vengamos con un hachazo ni que le hablemos del pasado. Nos votó por el futuro. Mauricio (Macri) y Gustavo (Lopetegui) escuchaban y la discusión la llevábamos dos. Y Marcos era más de los globos, las flores, de que la gente nos votó porque le vamos a dar un futuro mejor", recordó.