El Gobierno de Brasil advirtió hoy a la Procuración General de Argentina, a cargo de Alejandra Gils Carbó, que los datos aportados por directivos "arrepentidos" de Odebrecht no pueden ser revelados públicamente.
En una nota enviada hoy a la Procuración General argentina, el fiscal general brasileño Rodrigo Janot Monteiro de Barros afirmó que realizó una solicitud al "Supremo Tribunal federal para que se mantenga el secreto con respecto a todas esas pruebas cuando se refieran a hechos ocurridos fuera de Brasil".
"No se divulgará públicamente el contenido de esa parte de la colaboración y, consecuentemente, se evitarán eventuales perjuicios a la investigación que actualmente se realiza sobre el tema en el Ministerio Público dirigido por Usted", explica la nota enviada a Gils Carbó.
Asimismo, destaca que "existe la posibilidad de que el Supremo Tribunal Federal suspenda la confidencialidad de las declaraciones y documentos relacionados con otros países y que contienen la colaboración de ex directores de la empresa, decisión que tendrá efecto a partir del 1 de junio".