Este año ninguna de las siete fórmulas presidenciales tendrá contrincantes internos. Esto quedó confirmado en el primer minuto de este domingo, cuando venció el plazo para la presentación de los precandidatos para las PASO del 11 de agosto. Por eso, estas elecciones primarias aparecerán ante los ojos de la sociedad, la dirigencia política, el establishment y el mundo sólo como una gran encuesta nacional, sin contiendas previas, sin sorpresas.
Las siete precandidaturas presidenciales se resolvieron por voluntad de las cúpulas y élites partidarias. Pero las discusiones sí fueron arduas y se extendieron hasta último momento en las categorías de diputados y senadores, y dejaron varios heridos en los frentes que presentaron listas "de consenso".
Es el caso del peronismo de la provincia de Buenos Aires, donde algunos intendentes del PJ y sindicalistas quedaron disconformes porque a los principales lugares los definieron Cristina Kirchner y Sergio Massa, y no ellos, que se quedaron sin representación.
En algunas pocas provincias, en cambio, directamente no hubo acuerdo y se presentaron dos o más listas, de modo que sí habrá competencia interna.
En el oficialismo, que se presentará con la denominación Juntos por el Cambio (ex Cambiemos), el presidente Mauricio Macri terminó de definir en las últimas horas los lugares en las nóminas en territorio bonaerense y en la ciudad de Buenos Aires, luego de intensas negociaciones con sus aliados de la Coalición Cívica (CC) y de la Unión Cívica Radical (UCR).
La lista de precandidatos a diputado nacional por ese distrito estará encabezada por el ministro de Seguridad provincial, Cristian Ritondo, e integrada por María Luján Rey, madre de Lucas Menghini Rey, una de las víctimas del accidente ferroviario de Once; el radical Miguel Bazze y la macrista Silvia Lospenatto, recordada por su lucha a favor del aborto legal.
El Frente de Todos negociaba hasta último momento en el Instituto Patria la lista de precandidatos a diputado por la provincia de Buenos Aires, que encabezará Massa e integrará Máximo Kirchner —entre otros—.
Por su parte, Consenso Federal eligió a la flamante exmassista Graciela Camaño para encabezar la lista de diputados por la provincia de Buenos Aires, y confirmó la postulación del exintendente de Bolívar, amigo de Marcelo Tinelli y diputado nacional Eduardo "Bali" Bucca, a gobernador.
El binomio de Consenso 2030, Roberto Lavagna-Juan Manuel Urtubey, confirmó las postulaciones y relegó de la lista bonaerense a su aliada Margarita Stolbizer (GEN), quien sin embargo ratificó por Twitter su pertenencia al espacio.
Ejército
Cristina Kirchner no solamente decidió la lista de la provincia de Buenos Aires, que al ser el distrito más poblado tiene 70 de los 257 diputados nacionales (se eligen 35), sino que también tuvo directa decisión en al menos ocho provincias.
La precandidata a vicepresidenta puso el foco en las listas de senadores: por ejemplo, en Tierra del Fuego corrió a la gobernadora saliente Rosana Bertone, que finalmente será postulante a diputada, y en su lugar puso al camporista Matías Rodríguez.
Cristina también decidió las listas en Salta, Santiago del Estero, Río Negro, Neuquén, la Capital Federal, Entre Ríos y Chaco, donde rompió un acuerdo entre el actual mandatario, Domingo Peppo, y su antecesor, Jorge Capitanich.
Sumando a los actuales nueve senadores del Frente para la Victoria, Cristina podría quedarse con un mínimo de 15 bancas sobre 72 posibles, en una Cámara Alta en la que ninguna fuerza tendrá mayoría. Lo mismo, en Diputados.
La competencia ausente
Esta será la quinta vez consecutiva que en la Argentina se realizan por ley estas elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias, y la tercera vez que se aplican en elecciones presidenciales.
En 2011 hubo diez fórmulas presidenciales sin rivales internos, de modo que tampoco hubo primarias "reales". El tablero de las Paso de aquel año operó como un indicador de los comicios generales: Cristina Kirchner sacó el 50% y superó por 38 puntos al segundo, el radical Ricardo Alfonsín. En octubre obtuvo el 54%, con 38 de diferencia sobre el socialista Hermes Binner.
En 2015, en cambio, hubo 11 fuerzas con precandidatos a presidente, de las cuales tres presentaron dos o más fórmulas.
Estas fueron Cambiemos, con Mauricio Macri (ganador), Ernesto Sanz y Elisa Carrió; Unidos por una Nueva Alternativa (UNA), con Sergio Massa (ganador) y José Manuel de la Sota, y el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), con Nicolás del Caño (ganador) y Jorge Altamira.
En 2019, al igual que en 2011, la competencia interna será la gran ausente.
Filtro
Además de ser la principal encuesta nacional, las Paso, vigentes por ley desde 2009 y estrenadas en la elección presidencial de 2011, también operarán como colador, porque para quedar en carrera las fórmulas presidenciales, así como las listas de candidatos a diputado y senador de la Nación, deben obtener al menos el 1,5% de los votos válidamente emitidos.
Se descuenta que las tres principales fórmulas, Alberto Fernández-Cristina Fernández (Frente de Todos), Mauricio Macri-Miguel Pichetto (Juntos Somos el Cambio) y Roberto Lavagna-Juan Manuel Urtubey (Consenso 2030) superarán holgadamente ese piso.
Las restantes fórmulas son Nicolás Del Caño-Romina Del Plá (FIT Unidad); Manuela Castañeira-Eduardo Mulhall (Nuevo MAS); Juan José Gómez Centurión-Paola Miers (Frente NOS), Alejandro Biondini-Enrique Venturino (Frente Patriota) y José Luis Espert-Luis Rosales (Frente Despertar), aunque esta aún no estaba confirmada al cierre de esta edición.
Otras categorías
Aunque las fórmulas presidenciales este año ya estén predefinidas para octubre, hay algunas provincias donde los frentes electorales presentaron dos o más listas de precandidatos a diputado y/o senador de la Nación, de modo que sí tendrán una competencia real.
Por ejemplo, en Chaco, Juntos por el Cambio presentó dos listas de precandidatos: Víctor Zimmermann encabezará la lista de senadores, con la diputada Alicia Terada (a pedido de Elisa Carrió), en segundo término, y competirá contra la nómina encabezada por Alicia Azula, con Hugo Domínguez en segundo término.
Ambos espacios también presentaron listas de precandidatos a diputados nacionales, que también se enfrentarán internamente para quedar en la lista de Juntos por el Cambio para la elección general de octubre.
La novela de Espert
A horas del cierre del listas, el liberal José Luis Espert sostuvo no declinaría de su precandidatura presidencial, en la fórmula con el periodista de C5N Luis Rosales, pese a que la presentación se había puesto en duda.
Espert, un economista mediático, muy crítico del gobierno de Macri y del kirchnerismo, juntaba anoche a contrarreloj los avales necesarios para presentarse ante la Justicia, tras denunciar al Gobierno nacional de encabezar "un intento de proscripción light".
Sucedió que un aliado de Espert, el líder de UNIR, Alberto Asseff, aportó el sello de su partido pero después se pasó a las filas del oficialismo: Pichetto lo sedujo para quitarle el apoyo al frente de Espert, Despertar, y a cambio obtuvo un lugar en la lista de precandidatos a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires.
Espert argumenta que puede sostener su precandidatura porque quien dejó el partido Unir fue Asseff, mientras la convención partidaria ratificó su precandidatura presidencial.
El caso camina rumbo a la judicialización.