Tras prestar declaración indagatoria frente al juez Julián Ercolini, la expresidenta Cristina Kirchner habló con la prensa y criticó duramente al gobierno de Mauricio Macri. "No soy amiga ni socia comercial de Lázaro Báez", aseguró.
"Si mi Gobierno fue una asociación ilícita, este Gobierno es una asociacion ilicita terrorista porque mete terror en los ciudadanos (...) Esta causa es un disparate mayúsculo", remarcó.
Según explicó, presentó un escrito solicitando la nulidad de la causa y pidió que se realice una auditoría general de la obra pública nacional: ""Quiero que investiguen toda la obra pública. (El primo de Mauricio Macri, Ángelo) Calcaterra fue socio de Báez en muchas obras".
Asimismo, aseguró que el oficialismo busca evitar que se presente como candidata a la presidencia en 2019. "Están buscando la proscripción de mi candidatura. Apuntan contra los dirigentes que pueden ser candidatos", sostuvo.
"Esta es una maniobra de persecución política y hostigamiento mediático. El actual Gobierno trata de tapar el desastre económico y social que tiene la Argentina", sostuvo.
Más de cinco mil militantes kircheneristas, según informó La Nación, se congregaron en la puerta de los tribunales de Comodoro Py para "hacer el aguante" a la ex presidenta Cristina Kirchner en su declaración indagatoria ante Ercolini.
Además, en las inmediaciones podían verse otros dirigentes, como el ex titular de la Afsca, Martín Sabbatella, el titular del partido Miles, Luis D'Elía, la ex ministra de Cultura Teresa Parodi a Oscar Parrilli, a los diputados Axel Kicillof y "El Cuervo" Larroque y al ex titular de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde.