La Dirección de Comercio Interior de Tucumán, con Matías Canto a la cabeza, impuso una sanción de 104 millones de pesos a la empresa distribuidora de gas Naturgy, por afectar a usuarios, especialmente adultos mayores, debido a la falta continua de atención presencial en su sucursal de Concepción. Esta medida fue tomada a raíz de una sumativa de denuncias de los usuarios, que, durante la semana, debieron recurrir a la atención virtual.
Según explicó el subsecretario de Comercio Interior, Juan Carlos Bernarda, sanción se fundamenta en el artículo 27 de la Ley 24.240, que obliga a las empresas prestadoras de servicios públicos a garantizar la atención personalizada a sus clientes. La Dirección de Comercio Interior agotó todas las instancias conciliatorias antes de imponer la multa, incluyendo reuniones con representantes de Naturgy en el Concejo Deliberante de Concepción. Sin embargo, la empresa no cumplió con sus compromisos de mejorar sus servicios y agilizar trámites, lo que llevó a la imposición de la sanción.
En este aspecto agregó que “La atención presencial es un derecho, especialmente para los adultos mayores y aquellos que no tienen acceso o no están familiarizados con la tecnología”.
Esta medida fue tomada luego de intentar todos los medios posibles para alcanzar una conciliación con la empresa: se llevaron a cabo reuniones con representantes de Naturgy en el Concejo Deliberante de Concepción, en las cuales Naturgy se comprometió a mejorar sus servicios e instalar equipos electrónicos para agilizar trámites. Mas, al no cumplimentarse estas promesas, la DCI se vio obligada a aplicar sanciones de peso.
“Este problema no solo afecta a los vecinos de Concepción, sino también a los residentes de localidades cercanas, quienes deben trasladarse a San Miguel de Tucumán para realizar gestiones que deberían resolverse localmente”, subrayó Bernard.
Por su parte, Canto destacó que el objetivo de estas acciones son la protección de los derechos del consumidor en especial los sectores de vulnerabilidad: “La tecnología debe ser una herramienta complementaria, no un reemplazo de la atención presencial, que sigue siendo fundamental para muchos ciudadanos”.