El tucumano vicealcalde de Barcelona, visitó la casa de su infancia y el lugar donde fue secuestrado su padre, Ángel Pisarello, durante la última dictadura militar.
De vacaciones con su familia, llevó a sus hijos hasta el domicilio ubicado en la calle Piedras al 700. En ese lugar, recordó los ataques que el domicilio sufrió y el terrible momento que le toco vivir cuando su padre fue secuestrado y asesinado por los militares.
Durante su visita, compartió imágenes en su Twitter: "Hoy regreso con mis hijos a constatar que no nos han vencido, que quien deja huellas ni muere ni desaparece". En las fotografías se puede ver una junto a sus hijos con la casa de fondo, y la segunda es una imagen de la placa que recuerda a su padre Ángel con la frase "No desaparece quien deja huellas".
Pisarello, además de descansar visitará la Universidad Nacional de Tucumán, realizará entrevistas con los medios e irá con la familia de Facundo Ferreira, el niño de 11 años que recibió un disparo de la Policía.