Los presos alojados en unidades penales de la provincia de Tucumán podrán usar teléfonos celulares para comunicarse con sus familiares. De esta forma, buscan evitar las visitas mientras continúe vigente el aislamiento por Coronavirus, tal como ocurre ya en las cárceles de Entre Ríos, Chubut y Buenos Aires.
En ese sentido, informaron que el Servicio Penitenciario de la provincia trabaja con el área de Justicia en la elaboración de un protocolo que permita a los presos comunicarse con sus familiares cuando lo requieran.
"Lo más importante que tenemos ahora es el protocolo del uso de la telefonía celular dentro de la población de las unidades penitenciarias", sostuvo el subsecretario de Asuntos Penitenciarios, Esteban Zaracho.
"La provisión del aparato está a cargo de los familiares del interno, quienes deben garantizar su legalidad. El mismo va a ingresar, previo registro, a cada una de las unidades, donde permanecerá en un sector bajo seguridad y será utilizado entre las 8 y 18 horas del día, en las oportunidades que lo requiera", explicó el funcionario.
Aquellos que no tengan la posibilidad de contar con un celular, tendrán a su disposición el teléfono público de la institución. "Esas personas van a tener prioridad de uso de ese aparato que es el único medio de comunicación que vincula a los internos con sus familiares", agregó.
Zaracho señaló que también se llevan a cabo otras medidas para cuidar la salud de los presos y del personal de servicio, entre ellas "diversas actividades físicas en todas las unidades; eventos de fútbol, básquet y voleibol pero con una política de evitar la aglomeración de personas".
También se establecieron lugares especiales para "las personas de mayor rango etario y aquellas que tienen riesgos con el fin de resguardar su salud, así es que las medidas se llevan adelante con mucha firmeza. Tratamos de respetar todas las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), de lo que nos indican otros servicios penitenciarios y el Ministerio de Salud", concluyó el funcionario.