Un nuevo hecho arroja más oscuridad sobre el caso de Benjamín Amaya, el pequeño tucumano de cuatro años que fue colgado de un puente en la localidad de Las Talitas.
Cuando los investigadores llegaron al barrio, el martes en horas de la tarde, dos sujetos, sin mediar palabras, sacaron armas de fuego y comenzaron a disparar contra los efectivos que se movilizaban en un móvil policial. Ante el ataque, los agentes realizaron dos disparos disuasivos con balas de goma.
Con intenciones de huir, los agresores ingresaron a una vivienda y se subieron a los techos de las propiedades de la zona. Los efectivos de la División Homicidios de la Policía aprehendieron a un joven de 20 años por atentado y resistencia a la autoridad.
En tanto, los efectivos de la División Homicidios, a cargo del comisario Christian Peralta, continuarán realizando tareas investigativas a fin de aportar datos para esclarecer el asesinato del pequeño que conmocionó a toda la sociedad tucumana.