Esta semana comenzó el relevamiento sobre el estado de conservación de las pinturas rupestres de la provincia, tarea a cargo de la especialista en artes rupestres del Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano (INAPL), María Pía Falchi.
La Pampa cuenta con cuatro sitios con presencia de arte rupestre: Cueva Salamanca, Lihuel Calel, Chos Malal y Cerro Chicalcó. Se trata de expresiones de habitantes de épocas prehispánicas del territorio provincial, quienes utilizando diversos pigmentos naturales, lograron trazar estas impresiones en soportes rocosos.
En el relevamiento, Falchi estará acompañada por el director Provincial de Patrimonio Cultural, Ignacio Roca, y la directora General de Coordinación Cultural, Dini Calderón.
El trabajo de campo tiene como objetivo colaborar y asistir a la Secretaría de Cultura, para poder armar planes de manejo y conservación en el corto plazo, así como también contar con el asesoramiento de ese organismo, autoridad a nivel nacional, para la reglamentación de la Ley Provincial Nº 3104, de Protección del Patrimonio Arqueológico y Paleontológico, sancionada en el año 2018.
Las dos causas más frecuentes de deterioro de estas manifestaciones de arte rupestre son por agentes naturales y por actos vandálicos humanos. Por esta razón, resulta necesario realizar relevamientos frecuentes a fin de evaluar el estado de las pinturas y definir los correspondientes planes de manejo para su conservación.
El próximo jueves, la arqueóloga Falchi dará una charla, abierta a todo público, gratuita, y dirigida también a agentes y estudiantes de turismo, desde las 18:30 horas, en el auditorio del Centro Cultural Medasur, denominada "Arte rupestre pampeano: un bien cultural frágil y valioso", donde explicará su importancia como bien patrimonial y las correspondientes estrategias de conservación.