La tristeza cundió por partida doble entre los amantes de los deportes aéreos este fin de semana en Santa Fe. Horas después de confirmarse la muerte de un joven de 30 años en el sur provincial que practicaba saltos en paracaídas, este domingo se reportó el fallecimiento de un instructor en otro accidente en Esperanza.
El segundo episodio se registró por la tarde del sábado en inmediaciones de la Ruta Provincial 70, donde Sergio Chiappero sufrió graves heridas. En primer término, personal de los servicios de emergencia locales lograron reanimarlo tras un paro cardiorrespiratorio y lo trasladaron hasta el Hospital José María Cullen en la capital.
Las autoridades del efector informaron que el paciente de 55 años murió por la noche a causa de las lesiones que presentaba, entre ellas, varias fracturas.
A partir de los datos de fuentes policiales, la primera hipótesis en torno al caso es que el paracaídas de “Lulo” no se abrió, pero se esperaban los resultados los peritajes para esclarecer el hecho.
Chiappero era un experimentado instructor y había ido a participar en las prácticas del Club de Paracaidismo que funciona en el Aeródromo de Esperanza, unos 40 kilómetros al oeste de la ciudad de Santa Fe.
Por razones que son materia de investigación, el instructor cayó en cercanías a una cabina de peaje y pudo ser rápidamente atendido debido a que había testigos en la zona del impacto.
La Federación Argentina de Paracaidismo envió un mensaje de condolencias a los amigos y familiares de Chiappero para hacerse eco de la noticia. Lo mismo decidieron respecto de Juan José Bossio, el deportista de 30 años que falleció al mediodía en Cañada de Gómez.
La investigación del último hecho quedó en manos de detectives de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y de la Subcomisaría 18° de Esperanza.