La producción industrial santafesina cayó 0,3% en julio respecto al mes anterior, pero se desplomó 8,9% en la comparación interanual. Producto del cierre de 300 empresas, se perdieron 8.300 puestos de trabajo en el sector.
Así lo revela el último informe del Instituto de Investigaciones Económicas de la Federación Industrial (Fisfe), que da cuenta de una caída por decimocuarto mes consecutivo. Los números indican que la merma comienza a estabilizarse, pero no porque la situación esté mejor, sino porque comienza la comparación con meses muy malos del año pasado.
Además de las 300 empresas que cerraron, otras 330 se encuentran se encuentran con Procedimientos Preventivos de Crisis (PPC), por lo que el número de 8.300 despidos podría crecer de un momento a otro.
El rubro más afectado es el de la producción de automotores, que cayó 82,1% interanual, mientras que las autopartes lo hicieron 14,5%. Esta situación podría agravarse en breve, tras la decisión de General Motors de suspender al personal.
Otros rubros con fuertes contracciones fueron industria siderúrgica (-25,6%), prendas de vestir (-10,8%), productos de metal y servicios trabajo metales (-10,5%), carrocerías y remolques (-9,8%), productos lácteos (-6,4%), fiambres y embutidos (-5,5%) y maquinaria de uso general (-5,4%). Los que mostraron signo positivo fueron carne vacuna (+8,2%) y molienda de oleaginosas (+33,2%).