En Malargüe hicieron a un lado las restricciones para congregarse y los vecinos salieron a la calle para apoyar la obra de Portezuelo del Viento frente a las dudas que sembró el presidente Alberto Fernández sobre la continuidad del proyecto en el departamento sureño.
El que no se anduvo con vueltas y encabezó los reclamos, eso si con barbijo bien colocado, fue el intendente Juan Manuel Ojeda.
El jefe comunal malargüino aseguró que "esto va a llegar a donde tenga que llegar, Malargüe no puede seguir pasando lo que está pasando, no somos el último orejón del tarro".
"En algún momento hay que decir basta, basta de los atropellos que sufrimos, hemos entregado energía durante muchos años a la provincia y al país y ahora nos dan la espalda, no podemos seguir permitiéndolo. Esto tiene que llegar a todo el país, es el malestar de un pueblo que está demostrando el enojo contra una mala decisión", dijo sin rodeos Ojeda.
Para el intendente las declaraciones de Alberto Fernández en La Pampa asegurando que "no tiene sentido financiar una obra cuestionada por cuatro provincias" a menos de un mes de la apertura de la licitación representó "un escándalo internacional" y acto seguido le solicitó a los dirigentes del justicialismo mendocino que "se pongan la camiseta" y dejen a un lado sus intereses particulares.
"No me sirve una foto de (Anabel Fernández) Sagasti al lado del Presidente. Quiero que defienda a Mendoza y a Malargüe. Necesitamos que los dirigentes afines a la Presidencia de la Nación se pongan a favor del pueblo. Que Portezuelo se haga, que La Pampa y Neuquén, quienes tantos años han vivido de nosotros, dejen de poner palos en la rueda", reprochó.
Además de agradecer la presencia de los vecinos en la calle el cacique malargüino los instó a llevar esta protesta a las redes sociales e inundarlas con el "si a Portezuelo del Viento".