A través de una nota presentada al Concejo Deliberante, la Regional San Nicolás de la Federación Nacional de Conductores de Taxis solicitó a los ediles una actualización de las tarifas que rigen actualmente para el servicio.
El pedido es por un incremento del 30%, repartido en dos etapas: 20% en diciembre de 2017 y 10% a partir de junio de 2018. La solicitada, que repasa los aumentos sufridos por el sector, fue también firmada por remiseros.
De aplicarse la suba, la bajada de bandera pasaría de costar $23 a $27 luego del primer incremento y $29,50 a partir de junio próximo. En la misma proporción se elevarían las tarifas para las fichas de espera por cada 30 segundos y de distancia por cada 80 metros recorridos.
Éstas cuestan hoy al usuario $1,25, pero treparían a $1,50 y luego a $1,65. Eduardo Martín, titular de la Regional San Nicolás, advirtió que sin los incrementos solicitados la actividad y el servicio resultarían insostenibles.