Mario Gómez, el hombre que en 2019 mató de siete palazos a su vecino para robarle, fue condenado a prisión perpetua. La pena se conoció este jueves en la Sala II de la Cámara Penal, cuando los jueces Maximiliano Blejman, Víctor Hugo Muñoz Carpino y Silvina Rosso condenaron oficialmente al acusado por el homicidio agravado y el robo agravado por el uso de arma impropia cometidos contra Francisco Martínez, un comerciante de 70 años.
“Era lo que esperábamos”, expresó con un nudo en la garganta Daniela Martínez, hija de la víctima. La mujer escuchó la sentencia en compañía de su abogada Carolina Gianinetto. Tanto los argumentos de la letrada como de la fiscal Marcela Torres fueron considerados por el tribunal, que Gómez mató a ese vecino al que ocasionalmente le hacía trabajos domésticos, dándole 7 violentos golpes con un palo en la cabeza, con la intención de robarle.
El cotejo de ADN fue clave para esclarecer el caso, pues el mismo dio positivo entre el patrón genético de la víctima con sangre hallada en una chinela y un pantalón corto del acusado. De hecho, una vecina declaró que vio salir a Gómez tres veces de la casa del comerciante.
Si bien el defensor del sujeto pidió su absolución por el beneficio de la duda, poniendo en tela de juicio el testimonio de la vecina, los jueves hicieron caso omiso. También señaló tener dudas sobre la contaminación de la prueba, la sangre hallada en la chinela y pantalón del detenido.
Pese al fallo de los jueces, el defensor podrá reclamar ante la Corte de Justicia.