Emilia Soler, oriunda de San Juan, debutó en las audiciones a ciegas de La Voz Argentina. La joven de 20 años logró que todas las sillas se dieran vuelta.
La sanjuanina contó que empezó a cantar “desde que tengo memoria, siempre ha sido parte mía y de mi familia”.
Su papá, quien la acompañó junto a su mamá, explicó que todos los miembros de la familia son amateur y cada uno toca un instrumento.
La mamá de Emilia expresó lo que le pasa al escucharla cantar: “tiene una forma de interpretar y transmitir que es imposible no emocionarse”.
Antes de salir al escenario, la joven comentó que en la música encontró una forma de sacar todas las emociones que tiene en el cuerpo: “es un motorcito que me ayudó a seguir”.
“Espero que en el escenario encuentren a una persona muy completa y segura porque es mi sueño estar acá”, dijo y minutos después deslumbró al jurado.
Emilia interpretó el tema “At Last”, de Etta James, y dieron vuelta uno a uno: primero giró Ricardo Montaner, seguido por Lali Espósito, La Sole y por último Mau y Ricky.
Finalizada su audición a ciegas, le confesó a Lali que “me encantaría poder dedicarse a la música”. La jurado la halagó: “sos el combo soñado para cualquiera de nuestros equipos, es de valiente presentarse con esa canción”.
La joven contó que es amateur y los hermanos Montaner se identificaron con ella: “nosotros estuvimos muchos años soñando con dedicarnos a esto y, si es realmente tu norte, te necesitamos en nuestro equipo”.
La Sole también le ofreció estar en su team porque “me atrae que sos como un cascabel de alegría, me gusta eso”, explicó y le dijo: “tenes todas las posibilidades para lograrlo, te entregaste entera a la canción”.
Ricardo Montaner habló de lo que Emilia le generó: “tu voz se clava en el corazón y no sé cómo decirte que emocionas, que pones los ojos brillantes a la gente”, por eso “cuando uno encuentra cosas así, se siente afortunado”.
A pesar de todos los esfuerzos para convencerla, Emilia Soler eligió a Lali Espósito. “Vengo pensando la decisión desde hace bastante y mi sueño siempre fue estar en el team de Lali”.
Con su conocida impulsividad y frescura, la jurado mostró su emoción: “no lo puedo creer, gracias por elegirme” y le regaló un Martín Fierro.
Así le dio la bienvenida al Team Lali y a La Voz Argentina: “me atrevo decir que, más allá de sorprender, la veo con un camino largo, hacia el final de la competencia”, expresó la coach de Emilia Soler.