A dos años y medio del femicidio de Thalía Recabarren, el juez de Menores Jorge Toro decidió otorgarle la libertad al principal sospechoso del brutal crimen. Se trata de Ángel Morales, el joven que en 2016 confesó el homicidio y dio precisiones, después de cuatro días de búsqueda, del lugar donde estaba el cuerpo de su ex novia. Por ser menor de edad –tenía 17 años- quedó alojado en el Instituto Nazario Benavídez y ahora, tras cumplirse el paso legal, el magistrado le concedió la excarcelación bajo algunas restricciones.
El joven estaba alojado en un instituto de menores pero como transcurrieron dos años y la fecha del debate no fue fijada, quedó en libertad en el mes de octubre. Pero debe presentarse cada 15 días en el Juzgado de Menores. Además tiene la obligación de continuar con su tratamiento psicológico y psiquiátrico y el compromiso de reinsertarse a la sociedad laboralmente.
La liberación de Morales generó gran polémica en San Juan. Desde el juzgado señalaron que en principio el juicio iba a realizarse este año pero hubo un retraso por la cantidad de pruebas que el fiscal de la causa solicitó y que sin ellas no se puede realizar la elevación a juicio. Ante esta versión, el fiscal Aldolfo Díaz salió al cruce y señaló "ya está todo dado para que el juez Toro eleve el caso a juicio" porque ya presentaron un nutrido acopio de pruebas que serían concluyentes para la condena de la ex pareja de Thalía.
La decisión del juez sanjuanino también provocó gran indignación en la familia de la víctima. Anabella, mamá de la joven asesinada, se presentó este jueves en Tribunales y luego fue hasta la oficina del juez Jorge Toro a pedir explicaciones por la liberación de Morales. "Yo lo que quiero es que me digan por qué lo liberaron, que me den los resultados de la autopsia de Thalía. Si el caso de mi hija va a quedar impune que me digan y lo echen a un cajón", exclamó la mujer a Tiempo de San Juan.