En una semana, dos casos de discriminación a niños con discapacidad dentro del ámbito educativo sorprendieron a la sociedad sanjuanina, que repudió fuertemente ambos episodios. Primero una madre recibió el mensaje de la mamá de una compañera de su hijo, diciendo que lo saque de la escuela porque atrasaba a sus compañeros. Luego, una maestra no dejó entrar al jardín a un niño de cinco años con autismo porque la maestra auxiliar no había podido acompañarlo. Tanto desde el área Discapacidad como del Ministerio de Educación apelan a la generación de valores dentro de la familia. Las dos áreas de gobierno manifestaron su preocupación por estos hechos, que no son episodios aislados sino que están protagonizados por mamás que se animaron a denunciar. Otras simplemente callan.
Desde Educación, el ministro Felipe De los Ríos, descartó sancionar a la maestra que no permitió el acceso al jardín de un niño con autismo. "Lo que nosotros tenemos que hacer es convencer, nada que sea producto de la imposición da resultado. Es el convencimiento lo que hace cambiar a la sociedad. Todo nuestro equipo interdisciplinario va a ser el abordaje de esta situación, como lo hemos venido haciendo, hay que recordar que se ha aumentado la cantidad de profesionales pero no es una tarea sencilla. Tanto la mamá, el alumno que se vio perjudicado por todo esto, los directivos y los docentes deben tener una apertura para llegar al entendimiento", dijo a Tiempo de San Juan el funcionario.
El director de Discapacidad, Gastón Díaz, analizó la situación y aseguró que se necesita un cambio social para ir dejando atrás este tipo de actitudes. Informó que están desarrollando talleres de sensibilización para que las personas entiendan lo que experimenta una persona con discapacidad cada vez que es excluido.