Momentos de tensión se vivieron el lunes 28 de septiembre cuando los internos alojados en el Servicio Penitenciario Provincial protagonizaron un reclamo tras la detección de un brote de coronavirus en el interior de la institución carcelaria.
El pedido de los internos que desató los disturbios es el otorgamiento de salidas transitorias y prisión domiciliaria luego de que más de 100 internos fueran diagnosticados con coronavirus, así como las condiciones en las que viven, según detalló Diario Huarpe.
A través de un escueto comunicado, el Gobierno provincial informó que "en horas del mediodía de este lunes 28 de septiembre, tuvieron lugar diversas acciones que derivaron en la alteración del orden en el sector nº 1". Durante las protestas re realizó la quema de colchones en los pabellones 5 y 6, lo que motivó la intervención de Bomberos.
Familiares de los internos que estaban presentes en el lugar para llevarles mercadería, ya que el lunes es el único día en el que tienen permitido hacerlo, se agruparon en la puerta de la cárcel para exigir respuestas sobre la situación que se vivía puertas adentro.
En ese marco, una autoridad penitenciaria salió a dialogar buscando llevar tranquilidad a los familiares, asegurando que la revuelta "comenzó en el Pabellón 4, Sector 1" y añadió que la situación está controlada, no habiéndose registrado heridos de gravedad.
El funcionario, quien mantuvo fuertes cruces con los familiares de los detenidos, atribuyó la protesta a la impaciencia de los internos para con la realización de los test de Covid-19: "No quisieron aguardar la atención que realiza Salud Pública en conjunto con la gente de Sanidad del Servicio Penitenciario".
Los disturbios se desataron luego de que se detectaran 116 contagios este fin de semana en el Penal de Chimbas, mientras que las autoridades sanitarias provinciales aseguraron este lunes en conferencia de prensa que controlarán a 800 presos.