Un verdadero horror es lo que vivió un anciano de 78 años en la provincia de San Juan. Ladrones ingresaron a la pequeña piecita donde duerme y vive, lo ataron y le robaron lo poco que tenía. El hombre se llama Alfredo Montaña y desconsolado dijo no entender la cizaña con la que lo atacaron si apenas cobra 500 pesos por semana. "Deseo que a nadie le pase esto", dijo el hombre.
El terrible episodio ocurrió este jueves en la madrugada en una finca de Pocito, donde el hombre es casero desde hace 24 años. El abuelo estaba durmiendo cuando los delincuentes derrumbaron la humilde puerta de su habitación. "Vi que venía otro atrás y ya tomé conciencia que me iban a robar. Me dijeron que me iban a reventar la cabeza si no les daba la plata, no sabía cómo decirles que yo no tenía esa plata", contó.
Uno de los sujetos lo ató y lo tiró al suelo con violencia. Luego empezaron a pedirle dinero, con gran insistencia y casi desbordados. “Me dijeron que me iban a reventar la cabeza si no les daba la plata, no sabía cómo decirles que yo no tenía esa plata. Vinieron sólo a hacer daño”, sostuvo.
Como el hombre no tenía dinero, los malvivientes se llevaron una garrafa, un viejo celular, herramientas y las ruedas de un carro Montaña utiliza para la cosecha de aceitunas. "No tengo para comer, me pagan 500 pesos a la semana cuidando esta casa. No molesto a nadie y me pasa esto. Me enseñaron a no hacerle dramas a nadie, a arreglarme los problemas yo solo y veo que ahora los demás (personas que le robaron) hacen estas cosas para solucionar sus cosas", expresó angustiado.