En una iniciativa sin precedentes en el país y en la región, Tucumán será sede de la primera Torre de Inclusión de América Latina, un edificio pensado desde el inicio para eliminar barreras, facilitar trámites, brindar atención médica y garantizar la dignidad y autonomía de las personas con discapacidad.
El proyecto fue anunciado por el Ministerio de Salud Pública, bajo la conducción del doctor Luis Medina Ruiz, quien lideró una reunión estratégica con autoridades de distintas áreas para definir los lineamientos de esta ambiciosa obra que se emplazará en Campo Norte.
La torre, financiada por el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) en articulación con la Agencia Nacional de Discapacidad, contará con planta baja y un primer piso completamente accesibles, diseñados bajo los lineamientos de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
“El objetivo es cambiarle la vida a quienes más lo necesitan, con un espacio digno, moderno y humano. Va a concentrar servicios esenciales en un solo lugar, y lo hará con una arquitectura pensada desde la inclusión”, expresó el titular de Salud Luis Medina Ruiz.
Un espacio integral pensado desde el respeto
La doctora Hortensia Juárez, directora de la Junta de Evaluación de Discapacidad, explicó que el edificio fue concebido desde una mirada biopsicosocial, que contempla todas las dimensiones del bienestar de las personas con discapacidad: “Aquí se podrá tramitar el certificado de discapacidad, acceder a servicios de salud, gestionar subsidios o documentación del registro civil, pero también participar en actividades recreativas, culturales o formativas en un espacio adaptado y amable”, destacó.
El arquitecto Juan Toscano, del Siprosa, aportó que se trata de una obra que excede lo técnico y adquiere valor simbólico. “No será un edificio más, sino un emblema. Vamos a usar materiales cálidos, colores amigables, y priorizar la naturaleza. Habrá espacios verdes, un anfiteatro accesible, áreas deportivas y culturales”, adelantó.
Trabajo interinstitucional y enfoque en derechos
En el encuentro participaron también el ministro de Obras Públicas, Marcelo Nazur, los subsecretarios de Salud, Marcelo Montoya y Cristina Majul, y la arquitecta Leticia Pulido, entre otros referentes de infraestructura y salud. Coincidieron en que la magnitud del proyecto requiere una coordinación fluida entre los distintos niveles del Estado.
“Este proyecto es posible gracias al trabajo en equipo y a una firme decisión política del Gobierno provincial”, remarcó Medina Ruiz, quien reiteró que la salud pública debe estar al servicio de quienes más la necesitan.
Un paradigma nuevo en infraestructura estatal
La Torre de Inclusión será mucho más que un edificio funcional: representará un nuevo paradigma en la infraestructura estatal, donde la inclusión y los derechos humanos sean el punto de partida y no una adaptación posterior.