Desde la semana pasada, el influencer Santiago Maratea revoluciona las redes gracias a su movida solidaria para comprar una camioneta que se pudiera convertir en ambulancia, para la comunidad wichí Misión Chaqueña. La increíble convocatoria no solamente recolectó alrededor de tres millones de pesos para comprar el vehículo, sino que tuvo tanto alcance que la marca Chevrolet donó una segunda camioneta.
Tras recibir ambos vehículos, el influencer hizo un nuevo llamado a la acción para reunir donaciones de medicamentos, ropa y agua para llevar a los integrantes de la misma comunidad originaria. En diálogo con Clarín, el influencer comentó que esta idea se la dieron sus seguidores en las redes. “No lo había pensado. En las redes sociales me dijeron que ya que iba para allá, podíamos juntar un par de cosas que pueden necesitar y llevamos ese plus, muy importante “, comentó.
Esta nueva movilización también tuvo un gran alcance, especialmente la de un hombre que donó diez mil pastillas potabilizadoras de agua; cada una de estas puede purificar hasta cinco litros de agua, una colaboración que también cambiaría radicalmente la vida de estas personas. Por la cantidad de donaciones, el influencer pidió en las últimas horas ayuda para llevar las cajas a Salta, pero apenas unos minutos después surgió la solución: mientras buscaba lo reunido del depósito de San Isidro, se cruzó en el estacionamiento con un hombre llamado Diego, quien se ofreció a llevar todo porque tiene una casa rodante y puede hacer el viaje.
El viaje estaba planificado para este viernes 12 a las 3 de la madrugada, pero en sus historias Santi compartió que está teniendo problemas con la facturación y el papeleo de los vehículos. Por esta razón, debió modificar el horario de partida 24 horas. Esto significa que iniciará su partida a Salta el sábado 13 a las 3 de la mañana.
La colecta realizada por Santi Maratea recibió respuestas positivas, pero también resaltó una problemática que preocupa a los salteños desde hace años: el abandono de las comunidades wichí de parte del Estado. Así lo vieron sus seguidores al menos, a lo que el influencer respondió: “Me parece que es una forma de chicanear a los políticos que, si nos ponemos en los papeles, realmente, es imposible. Entiendo que la comunidad wichí no recibe ayuda sino que le ponen trabas y demás. La comunidad está muy olvidada, dejada de lado”.