El fiscal penal 1, Juan Marcos Ezequiel Molinati, dispuso la apertura del decreto de imputación provisional contra Gustavo Peñalva y su hermana, acusados por los delitos de amenazas, desobediencia judicial y atentado a la autoridad, en concurso real. Durante la audiencia de imputación celebrada ayer, Peñalva, asistido por su defensa particular, se abstuvo de declarar. Su hermana se encuentra fuera del país.
La imputación se debe a que, según difundió el Ministerio Público Fiscal, los acusados “desplegaron una conducta intimidante contra magistrados, al realizar manifestaciones públicas y posteos en redes sociales de manera reiterada, consistentes en el anuncio de un mal grave y futuro en perjuicio de funcionarios judiciales, con la finalidad de provocarles temor, por lo que atentaron contra su libertad e incumplieron con una resolución judicial dictada oportunamente”. El parte de prensa agrega además que “del análisis de las redes sociales surgió en la página de Facebook de la acusada, una publicación que reza “Pronto se vienen dos (seguida de la imagen de dos bombas) contra la corrupción judicial de Salta’”.
La semana pasada, la jueza Ana Zunino dio lugar a una medida cautelar solicitada por el fiscal Molinatti que prohíbe a la familia Peñalva a acercar a la Ciudad Judicial y los jueces y fiscales a cargo de investigar la muerte de su hija, Lujan, y la amiga de esta, Yanina Nuesch. “Esta cautelar demuestra que la Justicia salteña está cayendo muy bajo tratando de victimizarse y no permitiendo que un querellante se acerque a la Ciudad Judicial. Ellos son funcionarios y tienen que aguantar cuando la gente reclama”, había expresado Gustavo Peñalva, quien apeló a la medida.