Se llama Vicky Álvarez, tiene 40 años, y nunca vivió una situación así producto de las lluvias. Su casa queda en la Calle Chaco, en Apolinario Saravia, que corre paralela a la ruta provincial Nº5.
Tras el temporal que dejó a 400 evacuados, tiene a sus hijas distribuidas con distintos familiares hasta que el agua baje, luego de que la crecida trajo víboras y todo tipo de alimañas que pusieron en riesgo la salud de su familia.
Ayer, cuando el agua comenzó a inundar su casa, logró poner a salvo gran parte de sus bienes, pero sus vecinos no tuvieron tanta suerte, lo perdieron todo.
"Vivo a la vera de la ruta 5 que empezó a juntar agua y a elevarse por el fondo, empezó a venir hacía acá. Es como un canal y por ahí venía el agua. Empezó a entrar agua en las habitaciones, baño, en todos lados, el agua se mete y no hay como sacarla. Hay una parte que da con la calle del pueblo y ahí es más alta y ahí pude meter todo" contó a Informate Salta.
Con la crecida del agua, ella y los vecinos comenzaron a abrir bocacalles y limpiar los costados para abrir el paso del agua y que circule. También solicitaron maquinaria para poder despejar los caminos y evitar que el agua se siga acumulando. "Jamás nos tocó algo así, nunca pensamos que nos tocara pasar por esto. Recuerdo que cuando era niña sufríamos la crecida del río. Me acuerdo que nos llevó todo, nos dejó sin nada y recuerdo a mi mami de verla llorar".
Álvarez y su familia tienen un lavadero de autos del cual viven, pero tras la crecida quedó prácticamente bajo el agua, lo que los afecta fuertemente a nivel económico.
"En lo que nos puedan ayudar siempre es bienvenido, entendemos que no es culpa de nadie, es la naturaleza. Siempre lo vi en la televisión, siempre me conmovió ver esas personas que quedaban sin nada porque les entraba el agua, que no sabían que hacer. Ahora nos tocó a nosotros en carne propia" dijo la mujer.
