La situación en la frontera argentino-boliviana es cada vez más problemática. Ciudadanos bolivianos acostumbrados a ingresar al país de manera clandestina y sin ningún tipo de impedimento, se han visto de pronto en problemas por el cierre estricto de fronteras que trajo aparejado la pandemia del coronavirus.
Esta situación se agravó en los últimos meses producto del incremento exponencial de casos en Bolivia, donde, según los últimos reportes, la gente muere en las calles. Por este motivo las fronteras se guardan cada vez con más celo.
En esta ocasión, las fuerzas policiales, en distintos operativos, detectaron un total de 104 personas que, por distintos puntos clandestinos, intentaban ingresar al país de manera ilegal.
De estas 104 personas, 69 fueron detectadas en Salvador Mazza por el equipo operativo a cargo de la Unidad Regional 4. Los ilegales intentaban ingresar con el fin de realizar compras en la frontera. Todos fueron deportados.
Por otra parte, en Aguas Blancas fueron 35 los bolivianos deportados, en diversos operativos a cargo de la Unidad Regional 2, que realiza tareas preventivas en distintos puntos estratégicos a lo largo de la frontera.