Hace un par de días, la ciudad de Salta se vio conmocionada por el brutal ataque en patota a un padre y su hijo de 13 años mientras se movilizaban en el auto.
Según relata el hombre, transitaban en auto junto a su hijo, cuando una patota les tiró primero un vaso de vino, y después piedras al vehículo. En medio del ambiente de tensión, el perro que viajaba con padre e hijo se escapó del auto, y el niño se bajó para atraparlo.
Fue interceptado por la patota y uno de los cabecillas tomó una piedra y se la partió en la cabeza, provocándole heridas de gravedad.
Trascendió que tras pelear por su vida, el niño evoluciona favorablemente, y gracias a las cámaras de seguridad instaladas en la ciudad, se pudo identificar al joven que le arrojó la piedra que pudo haber sido fatal.
El padre del niño presentó su declaración ante la fiscalía el pasado miércoles, y este jueves la policía detuvo al sospechoso de herir de gravedad al menor.