El pasado 15 de junio, un hombre que vivía en situación de calle fue víctima de un violento crimen en la ciudad salteña de Pichanal. Cuando lo encontraron ya era demasiado tarde, pues había muerto a causa de una brutal herida que el agresor le había propinado en la cabeza.
Se trataba de Ernesto Bautista Rojas, conocido como Patilla, un indigente de 55 años al que le arrebataron la vida con un pedazo de bloque de concreto. Luego del terrible hallazgo de su cuerpo sin vida, los investigadores se avocaron a resolver el crimen.
Después de escuchar los testimonios de los vecinos de la zona, y de un largo análisis de las cámaras de seguridad, los investigadores lograron descubrir al autor del hecho: un joven menor de edad que sufre una fuerte adicción a los estupefacientes, y que el día del crimen, había estado deambulando por la zona.
Según trascendió, el joven y la víctima habrían mantenido una discusión que terminó con la muerte de Rojas. El acusado fue derivado al juzgado de menores de turno, siendo que se trataba de un menor de edad.