“Nosotros queremos agarrar todo Ludueña”, dijo Oscar Omar Ramírez sobre el plan de una organización narcocriminal asociada a “Los Monos”. Pasados varios meses con un pedido de captura sobre su cabeza, el prófugo fue a ver a Rosario Central y lo detuvieron este lunes después del partido con Colón de Santa Fe.
“Nenu” tiene 32 años y es el cuñado de Jonathan Almada, imputado como parte de la asociación ilícita que comandó Mauro Gerez hasta fines de mayo. A pesar de que lo buscaba la Justicia, estuvo en el Gigante de Arroyito durante la despedida del Canalla de la Liga Profesional.
La Agencia de Investigación Criminal (AIC) ya sabía que podía encontrar a Ramírez en la cancha porque lo identificaron hace dos semanas, cuando Rosario Central empató con Defensa y Justicia. De esta manera, montaron un operativo con agentes encubiertos dentro del estadio y en otros puntos de la ciudad donde podían dar con él.
Cuando terminó el partido, la policía empezó a rastrear al sospechoso con la pista de que manejaba un Fiat Cronos. Los uniformados interceptaron el auto en el cruce de Alberdi y French, a unas diez cuadras del Gigante, pero quien iba al volante era su padre.
El hombre de 61 años fue demorado y quedó en libertad durante la jornada. Sin embargo, “Nenu” no pudo escapar de las autoridades. Cuando fue a la casa de su hermana en el Fonavi de barrio Rucci, un grupo de agentes lo estaba esperando y logró apresarlo.
Panfletos y amenazas de una célula de “Los Monos”
Hace una semana, el cuñado de Omar Ramírez fue imputado por amenazas coactivas a representantes del Ministerio Público de la Acusación (MPA). Jonatan Almada es considerado como el instigador de un plan ejecutado por otras tres personas.
De acuerdo a la denuncia presentada el último jueves, “Nenu” también impulsó la elaboración de los panfletos arrojados para amedrentar al fiscal Pablo Socca. Las hojas fueron halladas entre el miércoles 31 de agosto y el 2 de septiembre frente a la puerta de la AIC, el Hospital de Niños Zona Norte, el Centro Municipal de Distrito Sur “Rosa Ziperovich” y la sede del grupo Televisión Litoral.
El MPA cree que el mensaje intimidatorio fue una respuesta a los allanamientos en los que detuvieron a Almada y cinco familiares: su padre, su sobrina, su pareja y dos hermanas. El presunto delincuente cayó el 23 de agosto, pero su cuñado logró escapar.
Ramírez era buscado como otro miembro clave de la banda que lideraba Gerez en los barrios Ludueña y Empalme Graneros. La investigación judicial indica que la organización narcocrimina tenía dos jefes presos en Piñero: Andrés Fabián Benítez y Julián Aguirre.