Pese al clima festivo que se respiraba en inmediaciones del Monumento, con motivo del Día de la Bandera, la violencia no se tomó descanso en Rosario. Este martes, dos nuevas balaceras sucedieron en puntos diferentes de la ciudad con una mecánica similar: sicarios que disparan indiscriminadamente, sin importar la hora ni el lugar.
El primer hecho sucedió durante las primeras horas del 20 de junio, cuando gatilleros en moto dispararon más de 15 veces contra el frente de una vivienda de barrio San Francisquito. La moradora de la casa ubicada en Amenábar al 3100 denunció que es la tercera vez que los atacan y, pese a la vigilancia policial que tienen asignada, nada detiene a los delincuentes.
La familia baleada manifestó desconocer el por qué de los ataques, ya que los delincuentes no dejan amenazas ni efectúan llamados para dar cuenta de los motivos detrás de las intimidaciones. La investigación del caso está a cargo del fiscal en turno de la Unidad de Flagrancia.
Una balacera en barrio abasto de rosario
Por otra parte, en horas de la tarde el barrio Abasto se vio convulsionado por un ataque a tiros sucedido en la esquina de Mitre y Cochabamba, donde funcionó una sede de la UOCRA y ahora es un domicilio de una persona que alquila.
En el momento del ataque, el inquilino estaba fuera de su casa, por lo que no hubo que lamentar heridos. Los disparos fueron alertados por los vecinos, que escucharon detonaciones cerca de las 18:30. Al llegar la Policía, encontró en el lugar cuatro impactos de bala en un vidrio y la presencia de una nota amenazante.
Efectivos de la Unidad Regional II y de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) realizaban el relevamiento de pruebas.
