Tres meses después de la muerte de Luciano Muscio en la Autopista Rosario-Buenos Aires, este miércoles quedó bajo prisión preventiva el primer imputado por el crimen en Alvear. Se trata de un presunto aliado de Uriel Luciano “Lucho” Cantero, señalado como uno de los nuevos referentes de “Los Monos”.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) informó que Juan Ignacio González es considerado coautor de homicidio calificado criminis causa. Así se refirieron al robo de la motocicleta del joven fallecido el domingo 3 de julio a la altura de Alvear.
De acuerdo a la investigación de la fiscal Marisol Fabbro, el joven de 28 años fue asesinado para arrebatarle una Honda Tornado 2009. En el momento del ataque viajaba con otra muchacha de la misma edad, aunque ella no recibió disparos.
Muscio cayó del rodado y falleció en el acto debido al ataque a balazos de dos delincuentes. En el MPA aseguran que “Juandi” fue uno de los agresores que se llevaron el vehículo una vez que derribaron a las víctimas frente a la planta de General Motors.
Según la investigación que se conecta con otras causas de homicidio, entre otros delitos, el asesinato fue parte de una de las actividades habituales de la banda que integra González. Fabbro planteó que la nueva generación de “Los Monos” se dedicaba a robar autos y motos para llevar a cabo negocios ilegales.
Además del crimen y la sustracción del vehículo, la fiscal rosarina imputó al joven detenido por portación ilegal de arma de guerra. El juez Héctor Núñez Cartelle ordenó que permanezca bajo prisión preventiva por el plazo de ley, al igual que otras 25 personas citadas en las audiencias que se desarrollaron desde el jueves anterior.
La búsqueda de la moto de Luciano Muscio
La pesquisa para esclarecer el asesinato de Luciano Muscio se centró desde el primer momento en la hipótesis del robo. Apenas unos días después del asalto, el MPA pidió colaboración para recuperarla. Según la denuncia, uno de los delincuentes se la llevó mientras que su cómplice lo siguió en el rodado en el que abordaron a las víctimas.
El joven de 28 años circulaba en una Honda Tornado modelo 2009 blanca y negra. El manubrio y la luz delantera habían sido cambiados y tenía algunas calcomanías sobre el faro trasero.
Según fuentes judiciales, la banda de “Lucho” Cantero buscaba este tipo de vehículos y solía hacer algunas tareas de inteligencia previas. En particular seguían lo que ocurría en picadas o encuentros de motoqueros.
