El gobernador Miguel Lifschitz aseguró que los reclamos de gremios estatales para aumentar un 35% los salarios "están totalmente alejados de la posibilidad de cualquier provincia" y consideró que la cifra incluso es inalcanzable para el sector privado.
En conferencia de prensa, el dirigente socialista manifestó este miércoles que "en los próximos días se va a discutir cuál es el piso" del incremento para los trabajadores que dependen del Estado santafesino.
En las vísperas de una nueva reunión paritaria con los referentes de ATE y UPCN, el mandatario admitió que la cláusula gatillo "es un criterio interesante" para arribar a un acuerdo sobre la remuneración. De esta forma, el Ejecutivo aceptaría que haya una "recomposición automática" si "la inflación se dispara o aumenta" por encima del valor consensuado con los gremios.