La Secretaría de Control y Convivencia intervino este domingo por la madrugada ante una nueva denuncia por picadas de motos. El operativo requirió la colaboración de la policía para desbaratar las carreras ilegales en inmediaciones de Oroño y Lamadrid.
Según fuentes del municipio, los motociclistas se reunieron en el mismo sector que había sido objeto de quejas por parte de los vecinos el último viernes, cuando los agentes municipales desactivaron otro intento de realizar pruebas callejeras. En esta última ocasión, 13 rodados fueron remitidos al corralón por infracciones a la normativa vigente.