La Agencia de Investigación sobre Trata de Personas y Violencia de Género, dependiente de la Policía de Investigaciones (PDI), realizó en la madrugada de este viernes cuatro allanamientos en domicilios de Zavalla y Rosario y logró desarticular una red de trata.
Las intervenciones dejaron como saldo once mujeres liberadas y tres detenidas, sospechadas de ser quienes administraban los espacios. Las apresadas quedaron a disposición de la fiscal Alejandra Reigal.
Uno de los allanamientos ocurrió en Ruta Nacional 33 a la altura del kilómetros 700 en Zavalla donde funcionaba un prostíbulo en cubierto, bajo la fachada de un bar nocturno.
Allí se constató la presencia de once mujeres mayores de edad -entre 19 y 36 años-, oriundas de Rosario, quienes ofrecían servicios sexuales a los parroquianos que se encontraban en el interior del local.
Según el Ministerio de Seguridad, en el lugar había ocho hombres de entre 33 y 56 años de edad.
Al momento de la llegada del personal actuante, se encontró in fraganti manteniendo relaciones sexuales a uno de los hombres prostituyentes.
Las mujeres víctimas fueron asistidas por el equipo interdisciplinario de la Agencia y del Instituto de la Mujer de la Municipalidad de Rosario. Del interior del bar se secuestró dinero en efectivo, documental de interés para la causa.
En el mismo predio se encontraban dos inmuebles que oficiaban de viviendas de las dueñas con sus correspondientes familias. En dichas propiedades se secuestraron 16 celulares, tablets, tarjetas de memoria, una CPU y una camioneta Ecosport.
El cuarto allanamiento se realizó en Rosario, sobre calle Magallanes al 1600, secuestrando la suma de 93 mil pesos en efectivo, título de propiedad del vehículo antes mencionado, documental vinculada al local nocturno.-
El operativo derivó en la detención de tres hermanas, mayores de edad, oriundas de Rosario. Se esperaba que la fiscal Reigal, imputara a las sospechosas de los delitos de promoción y facilitamiento de la prostitución y explotación económica de la prostitución.