Luego de que se confirmara la presencia de ADN en el segundo coche que participó de la picada que acabó con la vida de Andrés Muñoz, la familia exigió celeridad en el cambio de carátula de la causa y la detención de este conductor.
Las últimas novedades del fatal accidente ocurrido el 29 de julio en 27 de Febrero y Necochea indican que el Chevrolet Vectra que intervino en el hecho tenía rastros de ADN que el fiscal de Homicidios Culposos, Walter Jurado, ordenó peritar.
De esta forma cobra fuerza la hipótesis presentada por la familia de la víctima fatal, que sostiene que el Fiat Duna de Andrés fue embestido por el Renault Laguna y posteriormente el cuerpo fue arrollado por el Vectra.
"Estos hallazgos corroboran lo que veníamos diciendo desde el primer momento, y por eso pedimos celeridad en el cambio de carátula de la causa y en la detención de este segundo conductor", dijo Malena Copelo, abogada de los familiares de Muñoz.
La letrada indicó que el 23 de agosto pidieron constituirse en querellantes y que se ordene el arresto de este automovilista, pero la Fiscalía todavía no les respondió. "Mientras tanto esta persona está libre, sin ninguna restricción para conducir", manifestó en diálogo con Radio 2.
"Queremos que se lo impute por el mismo delito que el otro corredor de la picada: homicidio culposo triplemente agravado que implica prisión efectiva", apuntó y agregó que esta persona "podría escaparse o entorpecer la causa".
Los resultados de los estudios para corroborar si el ADN pertenece a la víctima fatal podrían demorar entre dos y tres meses. Más allá de esto, las pericias accidentológicas, los resultados de la autopsia y las imágenes corroborarían la participación decisiva del Vectra en el hecho.