Después de un lunes con al menos 14 llamados con amenazas de bomba en escuelas informadas a las autoridades y de más de 60 casos registrados solo en agosto, el Ministerio público dela Acusación (MPA) avanza en al identificación de los poseedores de las líneas telefónicas que se repiten en los registros advirtiendo sobre la presencia de artefactos explosivos.
La Fiscalía, a cargo de Gustavo Ponce Asahad, que tiene a su cargo la investigación de los casos ya habría identificado a cinco números. Según publicó el portal Tiempo de Justicia, dos de las líneas tendrían prefijo 011, correspondiente a la Capital Federal o Gran Buenos Aires.
La aparición de números registrados en territorio porteño llamaron la atención de los investigadores ya que hasta el momento se partía de la hipótesis de que eran los mismos alumnos los que anunciaban ante el 911 la existencia de supuestos explosivos.
El avance que Ponce Asahad registra en la causa redundaría en detenciones incluso antes del fin de semana, al menos así lo reportaron desde el mencionado sitio especializado en temas judiciales.
El plan del fiscal es el de establecer medidas de carácter ejemplar en el caso de lograr la imputación de algún sospechoso para motivar el cese de las amenazas.