Paralelamente a la saturación que expone el sistema de salud producto de continuo crecimiento de contagios de coronavirus, la violencia, que se profundizó en las últimas semanas, es otro fenómeno que mantiene aterrorizados a vecinos de muchos barrios rosarinos.
Este jueves no fue la excepción y al caer la noche se reportó un nuevo homicidio en la ciudad derivado de una ráfaga de disparos en la zona noroeste.
La víctima fatal fue identificada como Franco Nahuel Graseano de 22 años que ingresó sin vida al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA) cerca de las 21.
Según reportó el Ministerio Público de la Acusación (MPA) el joven fue trasladado desde calle Felipe Moré y French donde testimonios dieron cuenta que se encontraba en la vía pública junto a un grupo de personas cuando fue interceptados por dos sujetos no identificados. Lo cierto es que Graseano y sus acompañantes fueron agredidos con disparos de arma de fuego desde un vehículo para luego darse a la fuga en curso.
El cuerpo del muchacho fallecido presentaba ocho heridas de arma de fuego en el tórax y el abdomen. El caso quedó en manos de la fiscal Gisela Paolicelli de la Unidad de Homicidios Dolosos.
En el lugar se secuestraron diez vainas servidas que fueron enviadas a la sección balística a peritar para corroborar el calibre
