El arco de Rosario terminó siendo la gran vedette de esta cuarentena debido a la multiplicidad de factores y vinculaciones por el que pasaron los goleros con chances de emigrar y el que pudo haber llegado. Es que la tesorería de Central esperaba a esta altura tener novedades importantes respecto al jugador mejor cotizado del plantel: Jeremías Ledesma.
Sin embargo, y mas allá de los sondeos "serios" de algunas instituciones, el capitán sigue entrenando con sus compañeros en Arroyo Seco y eso desencadena una serie de movimientos y decisiones.Uno de ellos, el propio posible ingreso económico que puede llegar en forma de oxígeno financiero hasta fin de año, el otro era el reeemplazante que estaba listo junto al teléfono aguardando el guiño final (Jorge Broun) y otro protagonista que es Josué Ayala.
El ex arquero de Boca y Temperley también tuvo algunas posibilidades (Godoy Cruz y Patronato) pero no han prosperado.
Con este panorama, serán los tesoreros los mas preocupados. Broun tendrá su destino en Gimnasia porque ya no pudo esperar mas, Kily González se entusiasma con la idea de poder contar un tiempo mas con el pergaminense y Ayala deberá seguir remando en pos de una oportunidad que parece, en Central, no llegarle nunca.
Ribas, a Santiago del Estero
Una de las alternativas en ofensiva que manejaba el KIly era el uruguayo Sebastián Ribas. Sin embargo, la falta de dinero líquido para avanzar sobre la negociación y la buena propuesta por un préstamo con cargo de Central Córdoba, desembocaron el la firma del contrato del atacante con el Ferroviario, a préstamo y por una temporada.